Los libros de color.

En el salón de actos nos reunimos y vimos todos los libros de color.  Después de  tanto trabajo era difícil juzgar a los demás compañeros, disponíamos de poco tiempo y he de decir que todo sucedió muy rápido como una despedida al final no se podía decir todo lo que se quería.  Resultaba muy complicado poder ver a fondo todos los libros de color.  Fue como un juego de niños.